La Unión Europea y el Gobierno de España, con el apoyo de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), han convocado una Conferencia Internacional de Donantes en solidaridad con los refugiados y migrantes venezolanos en los países de la región, en el contexto de la COVID-19.
La conferencia tendrá lugar virtualmente el 26 de mayo, a las 16:00 horas CET. Más de 60 países, así como organismos de las Naciones Unidas, instituciones financieras internacionales y representantes de la sociedad civil nacional e internacional, abordarán conjuntamente esta crisis sin precedentes, movilizarán recursos para la población desplazada y las principales comunidades de acogida, y reforzarán la coordinación entre los principales agentes.
Los periodistas que deseen seguir esta conferencia podrán hacerlo en: https://youtu.be/eE5PV54LYPM
La salida de refugiados y migrantes venezolanos es una de las mayores crisis de desplazamiento externo en el mundo. Hasta la fecha, más de 5 millones de personas han abandonado sus hogares. Es esencial que la comunidad internacional responda con una clara muestra de solidaridad.
Se necesita apoyo urgente ya que COVID-19 supone dificultades para los refugiados y migrantes de Venezuela:
● Más de 5 millones de refugiados y migrantes de Venezuela han buscado y encontrado seguridad, trabajo, medios de vida, atención médica y otras oportunidades en todo el mundo: 4,3 millones se encuentran en países vecinos de América Latina y el Caribe, de los cuales 1,8 millones están en Colombia.
● Con una abrumadora mayoría de venezolanos en América Latina dependientes del sector informal de la economía, la actual emergencia mundial de salud pública ha agravado una situación ya desesperada.
● A medida que los refugiados y los migrantes pierden sus ingresos y las necesidades se disparan en medio de la cuarentena generalizada y las fronteras cerradas implementadas para contener la propagación de la pandemia de COVID-19, se necesitan tanto ayuda de emergencia como una mayor inclusión de inmediato.
Las vidas de los refugiados y migrantes de Venezuela están en peligro
● La pandemia expone a los refugiados y migrantes de Venezuela a dificultades aún mayores, ya que muchos han perdido todas las fuentes de ingresos y, a veces, sus hogares, exponiéndolos a la indigencia, la explotación, la violencia de género y el abuso.
● La gran mayoría de los venezolanos ahora necesitan asistencia urgente para satisfacer todas sus necesidades básicas, incluidos refugio, alimentos y atención médica.
● En medio del creciente miedo y la inquietud social, muchos refugiados y migrantes no pueden cumplir con las medidas de higiene y distanciamiento físico, lo que aumenta el riesgo de estigmatización.
● Muchos tienen acceso limitado o nulo a programas de salud y protección social nacional y redes de seguridad. Quienes viven en una situación irregular y sin documentación corren un riesgo particular de quedar excluidos.
● La separación familiar sigue siendo un desafío importante con capacidades disminuidas para implementar mecanismos de coordinación y seguimiento para niños no acompañados y separados.
● Con las escuelas y universidades cerradas en toda la región, los niños y los jóvenes están perdiendo oportunidades educativas debido al acceso limitado a la educación en línea y otras formas de educación disponibles para los nacionales.
Los gobiernos de la región están sobrecargados
● Hay esfuerzos de los gobiernos de toda la región para proporcionar protección, derechos y documentación a quienes han abandonado Venezuela.
● La inclusión de refugiados y migrantes en las respuestas y programas nacionales, que van desde la inclusión en la distribución de alimentos y artículos básicos hasta la inclusión en los sistemas de bienestar social, salud y protección social, es una parte esencial de la solución.
● A medida que el impacto económico de la pandemia de coronavirus comienza a sentirse en América Latina y el Caribe, las capacidades nacionales se extienden hasta el punto de ruptura y no se vislumbra una solución rápida.
Esta crisis sigue teniendo una peligrosa falta de fondos
● El plan de respuesta regional para los venezolanos sigue estando peligrosamente subfinanciado. Hasta la fecha, solo se ha recaudado el cuatro por ciento de los fondos necesarios.
● Se necesitan con urgencia fondos adicionales para apoyar los esfuerzos tanto de los socios humanitarios como de los países anfitriones.
Los socios humanitarios llevaron a cabo una revisión del Plan Regional de Respuesta a los Refugiados y Migrantes en mayo de este año para priorizar las actividades con el fin de satisfacer las necesidades más urgentes en cuanto a protección y asistencia vital, mientras intentan promover la inclusión de refugiados y migrantes de Venezuela en medio de la pandemia, intentando así complementar respuestas de los estados. Los requisitos actualizados ascienden a USD 1,41 mil millones, cubriendo 17 países en América Latina y el Caribe.
● Las organizaciones están trabajando las 24 horas para encontrar formas innovadoras de brindar protección y asistencia a los refugiados y migrantes a pesar de las estrictas medidas de cuarentena. Las actividades principales incluyen asistencia a través de modalidades remotas, programas de transferencias de efectivo ampliadas, expansiones de refugios, así como apoyo a medidas de salud pública, incluso mediante el establecimiento de espacios de observación y aislamiento para posibles casos positivos de COVID-19.
