Empieza el 2021 con una noticia triste: Sir Brian Urquhart, uno de los últimos padres originales de la ONU, murió a los 101 años de edad.
Sir Brian ha estado vinculado a las Naciones Unidas en un tramo muy largo de su historia y a uno de los tres pilares de la Organización, el del mantenimiento de la paz.
Urquhart ha sido y seguirá siendo una de las figuras más influyentes en Naciones Unidas.
Nacido en Reino Unido en 1919, formó parte del ejército británico durante la II Guerra Mundial, y, desde los inicios de la Organización fue uno de los que asesoró al Secretario General Dag Hammarskjold a poner en funcionamiento las primeras misiones de paz a través del establecimiento de las Fuerzas de Emergencia de la ONU, que en 1956 fue enviada a supervisar el cese de hostilidades en el Canal de Suez entre Egipto e Israel.
Las misiones de paz de la ONU son, por lo tanto, su gran legado.
La mayor parte de su carrera la desarrolló en la sede de la ONU en Nueva York y tuvo una participación muy activa, como Consejero de los cinco primeros secretarios generales de la ONU en los conflictos del Congo, Chipre, Cachemira, Namibia y el Oriente Medio.
El actual Secretario General, António Guterres, dijo, tras conocer la noticia del fallecimiento de Sir Brian, que “la huella que ha dejado Brian es una de las más profundas de la historia de la organización”.
Es autor de un libro autobiografco, “A Life in Peace and War” (Una vida en Paz y Guerra), que es, además, una referencia muy importante de la historia de la ONU.
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