Las Naciones Unidas están preparadas para ayudar al gobierno de Marruecos tras el terremoto de magnitud 6,8 que sacudió la cordillera del Alto Atlas el viernes 8 de septiembre.
Hasta el 11 de septiembre, más de 2.497 personas han perdido la vida y más de 2.476 están heridas. Se espera que el número de víctimas aumente a medida que continúen las operaciones de búsqueda y rescate, según la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA).
El epicentro se localizó en las montañas del Alto Atlas, a 71 km al suroeste de Marrakech, que, con una población de 840.000 habitantes, es la ciudad más afectada. Según los medios de comunicación, varias casas se derrumbaron y otros edificios sufrieron daños estructurales. La zona epicentral no está densamente poblada.
El Secretario General de la ONU, António Guterres, se declaró «profundamente entristecido» y expresó «su solidaridad con el gobierno y el pueblo de Marruecos en estos momentos difíciles».
La Asamblea General guardó un minuto de silencio en homenaje a quienes perdieron la vida en el terremoto. El Presidente de la Asamblea General de la ONU, Dennis Francis, se declaró profundamente entristecido y envió su más sentido pésame a las víctimas y sus familias.
«Hago un llamamiento a la comunidad internacional para que se una en apoyo de Marruecos en estos momentos de dolor», añadió.
Cientos de miles de civiles afectados por el seísmo
Los primeros informes de la Organización Mundial de la Salud (OMS) hablan de más de 300.000 civiles afectados por el terremoto en Marrakech y sus alrededores. También se ha informado de daños en partes de la Medina de Marrakech, Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.
Las autoridades gubernamentales marroquíes están dirigiendo los esfuerzos de respuesta; se ha activado el mecanismo nacional de rescate y respuesta; y se han desplegado unidades de protección civil para aumentar las reservas en los bancos de sangre y garantizar el suministro de recursos vitales como agua, alimentos, tiendas de campaña y mantas a las zonas afectadas, según la OCHA.
La ONU ha ofrecido apoyo en búsqueda y rescate, coordinación de la ayuda humanitaria y sanidad, según Nathalie Fustier, máxima representante de la ONU en Marruecos. La ONU mantiene una estrecha comunicación con las autoridades nacionales para ofrecer su apoyo en la evaluación, coordinación y respuesta a la situación. Se ha desplegado un pequeño equipo de la ONU para reforzar la capacidad existente de las Naciones Unidas.
Nathalie Fustier aseguró que la ONU, tanto a nivel nacional como mundial, está dispuesta a unir sus fuerzas con el Gobierno de Marruecos: «Hemos visto que hay una gran movilización y, de nuevo, estamos dispuestos a ayudar».
Los niños, entre los más vulnerables
UNICEF afirma que al menos 100.000 niños se han visto afectados por el terremoto y sigue de cerca la situación, dispuesto a apoyar al Gobierno de Marruecos para satisfacer las necesidades urgentes de las familias.
Los niños se encuentran siempre entre los más vulnerables en cualquier situación de emergencia, advierte UNICEF, que añade que es probable que muchas personas, incluidos niños, se hayan visto desplazadas debido a la destrucción de sus hogares, o porque temen regresar a las viviendas dañadas.
Según el Ministerio de Educación, 530 escuelas y 55 internados han sufrido daños, la mayoría en las provincias de Chichaoua y Taroudant.
Se han registrado varias réplicas, las familias siguen atrapadas bajo los escombros de sus casas, y el bloqueo de las carreteras y las difíciles condiciones geográficas siguen siendo un reto para llevar a cabo intervenciones de búsqueda y rescate. Muchos residentes buscaron refugio a la intemperie, temiendo una actividad sísmica adicional y soportando inquietantes réplicas.
Los bloqueos de carreteras causados por el terremoto se están levantando gradualmente a medida que se retiran los escombros. El Ministerio de Equipamiento y Agua informó de la reapertura de 18 carreteras nacionales, regionales y provinciales. Continúan los esfuerzos para despejar las carreteras, especialmente en las aldeas remotas de las montañas.
España y el Reino Unido entre los países que prestan ayuda
El ministro español de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación en funciones, José Manuel Albares, anunció que Marruecos ya ha solicitado oficialmente ayuda humanitaria a España, que enviará equipos de rescate para colaborar tras la tragedia del terremoto.
Un avión con 56 miembros de la Unidad Militar de Emergencias (UME) es el primer envío de ayuda humanitaria española que ya se encuentra en Marruecos. La ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, confirmó que están preparando un nuevo avión con la ayuda que quieren enviar varias comunidades autónomas españolas.
Mías información en UNRIC.es
